Brees sacrificó el físico

Drew Brees sacrificó el físico y tuvo que hacer un esfuerzo sobrehumano para soportar la que fue su última temporada como jugador de futbol americano profesional en la NFL.

Brees, el ex quarterback de los New Orleans Saints, decidió retirarse de la NFL luego de superar una temporada en la que sufrió un colapso pulmonar y 11 fracturas de costillas, razón por la cual se perdió cuatro juegos en 2020. Sin embargo, reveló este miércoles en un torneo benéfico de golf, que estuvo jugando a menos del 100% de su capacidad durante casi toda la temporada.

“Seré perfectamente honesto, solo me sentí realmente bien en un juego (en la semana 4 contra los Detroit Lions), desde la perspectiva de que tenía todas mis herramientas disponibles. Tuve muchas limitaciones a lo largo de la temporada en cuanto a lo que podía y no podía hacer. Lo tuve que reconocer, y eso es realmente difícil para un competidor”, confesó, de acuerdo con Jeff Duncan, de The Athletic.

Reconoció que la mayor parte de la temporada 2020 se vio afectado por una lesión abdominal, lo que mermó sus capacidades.

“Es realmente difícil jugar así. Pasaron cosas extrañas en mi cuerpo. Te dañan el hombro. Te rompen las costillas, un pulmón perforado.

“Esas lesiones te van limitando y te das cuenta que hay cosas que ya no puedes hacer. Como quarterback, todo lo que haces es la rotación. Y cuando ya no puedes hacerlo, empiezas a adaptarte. Es más difícil jugar así, sin embargo, tienes que encontrar una manera de hacerlo. Y sentí que lo hicimos. Pero fue difícil”.

Drew Brees

A pesar de las limitaciones y la ausencia por lesión, Brees ganó 9 de 12 aperturas y lanzó para 2,942 yardas y 24 touchdowns contra seis intercepciones.

Se espera que los Saints ingresen a la campaña de 2021 con Jameis Winston o Taysom Hill como los líderes de la ofensiva tras el adiós de Brees, quien sacrificó el físico hasta el final de su carrera.