El costo por usar su número

Pensar en el número 16 de San Francisco se relaciona directamente con Joe Montana. Lo mismo pasa con el 12 de los Patriots y Tom Brady, o el 13 de los Dolphins con Dan Marino, incluso el 18 de los Colts o Broncos de Peyton Manning. A lo largo de los años, el número sobre el jersey ha generado una identidad y conexión con los jugadores.

Este se ha vuelto tan importante, que cuando un atleta reconocido se retira de las canchas, el equipo le muestra respeto quitando su número para siempre, como un símbolo de grandeza.

Por ejemplo, ahora Carson Wentz no pudo conservar su habitual número 11, con el que jugó en los Eagles y en la universidad. En su arribo a los Colts, tendrá que buscar un nuevo dígito para él, ya que el receptor Mittchael Pittman decidió no cedérselo al quarterback.

Este el costo de algunos jugadores por usar su número.

Deion Sanders: número 21

Cuando el corredor llegó a los Cowboys en 1995, tenía seis años como profesional y se había hecho de un nombre y de su número 21. Para evitar cualquier tipo de discusión o mal entendido, Sanders sorprendió al cornerback Alundis Brice con un BMW 325i -el coche de sus sueños- y una nota en su casillero con el mensaje “Ahora dame mi maldita camiseta”, Brice no dudo ni un segundo.

Eli Manning (10)

En lo que podría sonar como un capricho del quarterback, Manning consiguió la camiseta con el mismo dorsal que utilizó en la universidad, después de pagar unas vacaciones con todo incluido durante una semana en florida al pateador Jeff Feagles.

Donovan McNabb (5)

En su última temporada como profesional llegó a los Minnesota Vikings, y durante 12 campañas tanto en Eagles como en Washington ocupó el número 5, y con su nuevo equipo no iba a ser la excepción. Para asegurar su número el pateador Chris Kluwe le pidió que donará $5,000 dolares a una organización, mencionar a la banda Kluwe Tripping Icarus e ir por un helado. Sólo cumplió su palabra con la caridad.

Otros jugadores que pagaron por seguir usando su número fueron: