La misión en Cincinnati es cuidar a Burrow

En Cincinnati hay una esperanza de mejoría y va de la mano de Joe Burrow. Los Bengals aprendieron una lección a la mala y tienen la misión de corregir una falla que los ha perseguido en los años recientes.

Cuando los Bengals eligieron a Joe Burrow en la primera posición global del Draft en 2020 lo hicieron con la esperanza de que fuera el eje de la transformación de la franquicia y no estaban tan lejos de la realidad. El problema fue que no le dieron la protección necesaria para que se mantuviera sano y completar su primera temporada como profesional.

La línea ofensiva de los Bengals fue de las peores evaluadas en la NFL, solo por encima de la de los Giants y los Rams en evaluación general según PFF y la número 27 en situaciones de pase.

Joe Burrow dio muestras de ser el quarterback que puede sacar a Cincinnati del hoyo, siempre y cuando el equipo sea capaz de protegerlo. Una lesión en la rodilla acortó su temporada de novato y puso en riesgo su participación en el arranque de la pretemporada de 2021, por lo que la misión en 2021 sera cuidar mejor a Burrow.

Burrow, la primera selección global del Draft en 2020, fue capturado 32 veces y sufrió 42 golpes en las 11 semanas en las que vio acción en la NFL. Tenes una línea ofensiva deficiente es una constante en Cincinnati, así fue en las cinco temporadas más recientes.

La buena noticia es que para 2021 tienen los recursos para poner en marcha la misión: mantener a Burrow sano y salvo.

Los Bengals deberán ser agresivos en la construcción de una línea ofensiva sólida y tendrá que ser en combinación entre la agencia libre y vía el reclutamiento colegial en el Draft.

De la línea ofensiva solo se salvan dos jugadores de la temporada pasada, el tackle izquierdo Jonah Wiliams y el centro Trey Hopkins, ambos se recuperan de lesiones, otro mal que aquejó a la línea en 2020, pues un total de 10 jugadores distintos tuvieron al menos 200 jugadas en la temporada.

Un lujo sería que Penei Sewell le cayera a los Bengals en la quinta posición global del Draft, lo que facilitaría la misión de cuidar a Burrow. En caso de que no suceda, hay otras opciones y muchas otras necesidades que cubrir en el equipo.

En la agencia libre deberán perseguir a jugadores como el guard Joe Thuney, o el tackle Matt Feiler, quien también puede jugar en el interior de la línea, pero su mejor temporada la tuvo como tackle derecho.

La posición de receptor abierto es otra gran urgencia a reforzar en Cincinnati toda vez que A.J. Green ya cumplió su ciclo; Tyler Boyd encabeza el grupo para la temporada 2021 y tiene un joven talentoso del otro lado en Tee Higgins, pero no le caería nada mal a Burrow tener un reencuentro con Ja’Marr Chase.

La ofensiva de los Bengals fue de las peores en pases profundos en 2020. Sus quarterbacks completaron 15 pases de 20 o más yardas de 73 que intentaron, un porcentaje de 20.5, 8 puntos por debajo de cualquier otro equipo en la liga.

Para completar el cuadro de las necesidades que urge rellenar en el roster, está contar con una línea defensiva agresiva y capaz de colapsar el frente ofensivo de los rivales y arroparse con backs defensivos capaces. En 2020 fueron agresivos en ese sector en la agencia libre, pero la mala fortuna y las lesiones los golpearon al caer Trae Waynes y D.J. Reader lesionados. Tenerlos de vuelta sanos será una mejora en la defensiva, pero necesitarán profundidad.

Dos nombres clave quieren probar el mercado de la agencia libre, pero deberán evitar la salida de William Jackson y Carl Lawson. Sin duda hay esperanza en los Bengals de cara a la temporada 2021, pero necesitan mejorar en varias líneas para competir en una división en la que los Cleveland Browns dieron un salto de calidad y los Baltimore Ravens no dejan de ser sólidos.

Los Steelers son por tradición los mandones ahí, pero encaran decisiones complicadas y pueden venir de bajada, algo que deberán aprovechar en Cincinnati, que tiene la misión especial de cuidar a Joe Burrow para tener la esperanza de ser un equipo contendiente en esa división.