Pretemporada, una pérdida de tiempo (y dinero)

Por Luis Alonso

¿Qué tan intrascendente se ha vuelto la pretemporada de la NFL?

Mucho. Es irrelevante y riesgosa. Es por ello que la debemos considerar una etapa en la vida del futbol americano profesional que está en peligro de extinción.

El enfoque de los coaches de los equipos apunta a no querer arriesgar a sus jugadores estrellas, aquellos que marcan la diferencia en los juegos cerrados. Es así que los titulares tienen muy poca participación en los “juegos de preparación”. Los dueños pueden respirar más tranquilos sabiendo que sus principales bienes están alejados del riesgo de sufrir una lesión en partidos que no tienen trascendencia. Aunque no siempre funciona, o de lo contrario pregúntenle a Lamar Miller, de los Texans.

La tendencia apunta a trabajar en prácticas conjuntas entre dos equipos en las que los entrenadores pueden simular situaciones de juego específicas y tener muchas repeticiones y dar instrucciones de evitar contactos de máximo impacto o a máxima velocidad.

En los partidos de exhibición, el primer equipo de las unidades ofensiva y defensiva han saltado al campo de juego lo mínimo necesario para tomar un poco de ritmo, saciar los deseos del golpeo y escuchar el crujir de la utilería al chocar con un rival.

El resto del tiempo fue empleado por los equipos para encontrar a los jugadores que van a complementar los rosters de sus equipos, aquellos que dan profundidad y equilibrio.

En un deporte de alto riesgo como es el americano, los jugadores suplentes necesitan estar listos para entrar cuando son requeridos, ya sea por una lesión o una situación de juego muy especial. Para ello se entrena, pero es en la pretemporada cuando esos jugadores de complemento obtienen una muestra de lo que es la NFL en tiempo real y a máxima velocidad.

Es para ellos que los partidos cobran relevancia, pero para los aficionados los juegos son un espejismo y hasta una aburrición, porque no ven a sus estrellas en el campo. Es como ver un equipo bizarro.

Los dueños de los 32 equipos parece que apuntan a un plan de expansión de la temporada regular, lo que implicaría reducir la pretemporada.

No está claro cómo lo piensan hacer, ya que no se sabe a ciencia cierta de una propuesta formal sobre el caso a la NFLPA, el sindicato de los jugadores.

Ha trascendido, a través de Dan Graziano de ESPN, que los dueños de los equipos llevarán esta carta en las negociaciones del nuevo contrato colectivo de trabajo, en la que los jugadores seguirán buscando recibir una mayor participación de las ganancias que genera la liga, que en el formato actual alcanza un tope del 47 por ciento.

La última llamada

Este jueves entran en acción los 32 equipos de la liga en un maratón de juegos que ayudarán a definir las últimas batallas para que los rosters se ajusten en 53 jugadores, será la última vez que muchos se vistan con un jersey de la NFL. Todos los equipos deben reportar su lista final el sábado 31 de agosto a las 15:00 horas, tiempo de México (16:00 horas tiempo del Este en Estados Unidos).

Mucho revuelo causó la contratación del quarterback de ascendencia mexicana Luis Pérez con los Lions de Detroit, quien desde mi punto de vista llega para cumplir una cuota de quarterbacks para usar en el último juego, con pocas opciones de quedarse entre los 53 elegidos, tal vez pueda quedar como parte de la escuadra de prácticas.