Rodgers pensó en el fin de su carrera

Aaron Rodgers pensó que su carrera había llegado a su fin después de su lesión en el tendón de Aquiles.

El quarterback de los New York Jets reconoció en una entrevista para el podcast “I can fly” que llegó a pensar en que no regresaría a la NFL después de una lesión de esa magnitud.

“Realmente estaba pensando, ‘Este es el fin. No volverás de esta lesión’”, admitió en el episodio que se publicó el martes.

Rodgers sintió que había recuperado la pasión por el futbol americano después del intercambio que lo llevó a los Jets luego de jugar los primeros 18 años de su carrera profesional con los Green Bay Packers.

“Tuve una temporada baja increíble en una nueva ciudad, con nuevos compañeros de equipo, una nueva organización, finalmente con un dueño y realmente me volví a enamorar del juego que me atrapó por primera vez cuando tenía cinco años”.

Describió la experiencia como algo muy satisfactorio en una etapa muy importante de su carrera, en la que sintió una conexión especial y profunda al llegar a los Jets, equipo que no gana un Super Bowl desde 1969.

Llegó la noche de su presentación con el equipo de Nueva York, que con su llegada había la confianza de que había llegado la última pieza que faltaba para redondear un roster capaz de ser campeón de la NFL, en un 11 de septiembre, recordando los atentados a Nueva York.

Después de un momento climático cuando salió con la bandera de Estados Unidos durante la presentación de los equipos, llegó la oscuridad y con ello Rodgers pensó en el fin de su carrera, cuando sufrió la ruptura del tendón de Aquiles.

“Y luego, una de las noches más desgarradoras de mi vida, cuando solamente pude participar en cuatro jugadas. Hablemos de algo que puede matar tu ego”.

Aaron Rodgers, qb de los jets

El veterano de ahora 40 años, vivió realmente momentos de angustia, en los que pasó por su mente la posibilidad de no volver a pisar un campo de futbol americano. Recordó que en el vuelo de regreso a su casa en California, llegó un momento de quiebre, en el que le pidió ayuda a los amigos que lo acompañaron en el vuelo.

“Dije: ‘Necesito ayuda. Esto va a ser muy difícil. Sólo necesito que todos ustedes estén ahí para mí en los días difíciles en los que deje de creer que es posible'”, recordó Rodgers. “Es difícil pedir ayuda”.

Después de que Rodgers pensó en el fin de su carrera, el momento de quiebre duró muy poco, pues su mentalidad lo llevó a concentrarse en su operación y en comenzar lo más pronto posible con su rehabilitación.

Fiel a su costumbre, fue en contra de lo establecido y retó a las probabilidades de un regreso de un desgarre del tendón de Aquiles y llegó a entrenar durante la temporada con la opción de jugar, misma que fue descartada cuando el equipo quedó matemáticamente fuera de toda opción de avanzar a los playoffs.