NFL
Wilks y Horton se suman a la demanda de Flores vs. NFL
Steve Wilks y Ray Horton, dos entrenadores de color, se suman a la causa de Brian Flores.
Dos entrenadores se sumaron a la demanda de Brian Flores en contra de la NFL y sus equipos por prácticas discriminatorias en el proceso de contratación de coaches representantes de minorías en Estados Unidos.
Se trata de Steve Wilks, exentrenador en jefe de los Arizona Cardinals, y Ray Horton, quien tuvo su última posición en la NFL como coach de backs defensivos con Washington en 2019 después de muchos años de experiencia en la liga.
Así lo dieron a conocer los abogados de Flores, quien actualmente tiene una posición de asistente defensivo en los Pittsburgh Steelers.
A Wilks le dieron los Cardinals una oportunidad de ser entrenador en jefe, cargo que ocupó solamente un año, en 2018 con Josh Rosen y Sam Bradford como quarterbacks, y terminó con récord de 3-13 para ser despedido. Su lugar fue ocupado por Kliff Kingsbury, actual entrenador en jefe del equipo.
Horton, coach asistente en la NFL entre 1994 y 2019, que llegó a ser coordinador defensivo en Arizona Cardinals, Cleveland Browns y Tennessee Titans, se entrevistó para la posición de head coach de los Titans en 2016 y argumenta que fue parte del proceso solo para cumplir con la regla Rooney.
Las causas de Wilks y Horton se sumaron en una demanda enmendada que se presentó en el Distrito Sur de Nueva York y que es en contra de la NFL, Miami Dolphins, Denver Broncos, New York Giants, Houston Texans, Tennessee Titans, Arizona Cardinals, además de otros 26 equipos nombrados como “John Doe”. Fueron agregados los Titans, Cardinals y Texans como parte de la enmienda.
Los abogados de Flores alegan en la enmienda, que los Texans se “vengaron” de Flores al quitar su nombre de los candidatos para asumir el cargo de entrenador en jefe “debido a su decisión de presentar la acción legal y hablar abiertamente de la discriminación sistemática que hay en la NFL”.
En el caso de Wilks, la demanda se presenta por haber sido contratado como “coach puente” a quien “no se le dio una oportunidad significativa de tener éxito”, considerando su despido después de una temporada para darle el cargo a Kingsbury, que, si bien ha tenido éxito, los abogados escribieron en la demanda que “el Sr. Wilks, si hubiera tenido la misma oportunidad que se le dio a Kingsbury, seguramente también habría tenido éxito”.
Wilks regresa este año a la NFL como coach de backs defensivos y coordinador de juego de pases, con Carolina Panthers, después de ser coordinador defensivo a nivel colegial el año pasado con la Universidad de Missouri.
Horton argumenta en la demanda que en 2015 fue parte de un falso proceso de selección de entrenador en jefe con los Titans y que solo fue entrevistado por cumplir con la regla Rooney. Los Titans terminaron por contratar a Mike Mularkey como entrenador en jefe, después de ser coach interino nueve juegos, mientras que Horton se fue como coordinador defensivo en Cleveland. Hoy está retirado.
Mularkey habló del tema en el podcast “Steeler Realm” cuando le preguntaron si había algo de lo que se arrepintiera en su carrera en la NFL.
“En algún momento acepté ponerme en una posición, cuando estuve en Tennessee, de ser parte de algo que me arrepiento y todavía lo hago. Los propietarios, Amy Adams Strunk y su familia, se acercaron y me dijeron que yo iba a ser el head coach en 2016 después de que ellos pasaran por el proceso de la regla Rooney. Así que, ahí estaba, sentado sabiendo que iba a ser el head coach mientras ellos pasaban por este proceso de contratación falso”.