Una nueva era en Saints

Los New Orleans Saints surgieron como un equipo de expansión en 1967 que parecía destinado al fracaso. Las primeras temporadas del equipo fueron tan frustrantes que los aficionados en Nueva Orleans adoptaron el apodo de “the aints”, un sobrenombre que refleja la incapacidad del equipo de tener una temporada ganadora. De esta época destacan los años con Archie Manning, conocido como el llanero solitario por la muy poca ayuda que la franquicia le pudo brindar para competir en la NFL.

Aunque en 1979 y 1983 los Saints finalizaron con marca de 8-8, no sería hasta 1987 que los Saints consiguieron una temporada con marca ganadora liderados por el quarterback, Bobby Hebert. Jim Mora fue reconocido como coach del año y es muy recordada la legendaria defensiva 3-4 de los Saints en los ochentas conocida como “the dome patrol”, conocida por ser la única unidad de linebackers en la historia de la NFL que mandó a sus 4 apoyadores al Pro Bowl en 1992.

En los noventas el equipo no tuvo mucho éxito al solo conseguir un título de la NFC West en 1991. En 1999, el entonces Head Coach, Mike Ditka, mandó todo el draft del equipo para poder seleccionar al corredor de Miami, Ricky Williams. El movimiento no tuvo el éxito esperado, sin embargo en 2006 llegaron Sean Payton y Drew Brees para comenzar la mejor era en la historia del equipo al coronarse en el Super Bowl XLIV.

La reconstrucción en Saints

Aunque ahora el equipo logró enfrentar los graves problemas de tope salarial que dejó Sean Payton, los Saints ya se movieron en el draft para tomar la selección 16 y 19 de los Eagles a cambio de 5 selecciones, incluidas dos de primera ronda. Un movimiento agresivo con el cual Nueva Orleans busca recuperar el protagonismo que los Tampa Bay Buccaneers les han robado en las últimas 2 temporadas.

Las posiciones de receptor abierto, quarterback y tackle nariz, son las grandes favoritas a ser llenadas con las dos selecciones dentro del top 20 global de este año.

Allen será el entrenador 17 de la franquicia

Será la segunda aventura en la NFL para Dennis Allen, luego de los 3 años que estuvo al frente de los Oakland Raiders en el periodo 2012-14. Allen fue el segundo entrenador de corte defensivo desde John Madden en la década de los setentas, sin embargo, a su llegada, “los malosos” tenían gran parte de su draft comprometido y no pudo hacer mucho en las 2 temporadas y 4 partidos que estuvo al frente del equipo.

Allen era el gran favorito del equipo entre candidatos que incluían a Brian Flores, Doog Pederson, Aaron Glenn y Eric Bieniemy.

Ahora el principal reto es reemplazar los gigantes huecos dejados por el mejor liniero ofensivo que tenía el equipo. Terron Armstead se fue a Miami, y aunque tenía algunas problemas para jugar las temporadas completas, fue siempre un seguro de vida para Drew Brees y Jameis Winston al cuidar su lado ciego. Allen también tiene el gran reto de recuperar al receptor dos veces all pro, Michael Thomas, quien no ha superado las mil yardas desde la campaña 2019.

Este año no habrá competencia de quarterbacks en el roster de Nueva Orleans, Jamies Winston se espera que sea el titular luego de que los Saints firmaron a un quarterback que ya demostró que puede ganar en la liga por 2 años y 28 millones, aunque este año tendrá un equipo muy distinto. Taysom Hill estará enfocado en labores de ala cerrada aunque seguirá probando suerte de vez en cuando en jugadas de diseño.

El perímetro es un área de urgencia y por ello los Saints ligaron al ex profundo de los Jets, Marcus Maye, a un contrato de 3 años y 28 millones de dólares. Maye viene de jugar con etiqueta de jugador franquicia y también de romperse el tendón de Aquiles en la semana 9. El equipo también consiguió traer de nuevo al versátil P. J. Williams, un jugador que llegó como esquinero, pero que ha sido transformado en safety gracias a los esquemas de Dennis Allen.

Daniel Sorensen también llega proveniente de Kansas City para aportar su experiencia como profundo, aunque más que nada se espera más de él en los equipos especiales. Esto significa que los dos profundos titulares de Nueva Orleans serán nuevos y que con ello el equipo sufra un ligero retroceso tras el adiós de Marcus Williams a los Ravens y del veterano Michael Jenkins.

Esta temporada regresó Mark Ingram, líder histórico en yardas del equipo (6267), se espera que Ingram le quite muchos snaps a la gran estrella del equipo, Alvin Kamara, además de la muy grande posibilidad de que el equipo busque un corredor en el draft. La dupla Kamara-Ingram dejó muy buenos recuerdos, aunque habrá que ver en que nivel regresa el veterano de 32 años de edad.