Philadelphia acciona el plan B y prepara el C

Después de estar en lo más alto de la NFL tras ganar el Super Bowl LII, en 2017 ante Tom Brady y los Patriots, Philadelphia Eagles vinieron a menos. La temporada 2020 marcó el parteaguas para la renovación del equipo después de terminar con récord de 4-11-1, el segundo peor del siglo para los Eagles, solo por detrás del registro de 2012, cuando terminaron 4-12.

Viene una nueva época para la franquicia con la llegada de Nick Sirianni como el nuevo head coach, y la salida del quarterback Carson Wentz, a quien consideraban la pieza clave de la franquicia.

La salida de Wentz parecería que le deja el camino libre a Jalen Hurts, quien terminó al mando de la ofensiva al final de la temporada, pero le podrían traer competencia o un plan b, por si acaso.

Una de las principales preocupaciones para Sirianni y los ejecutivos de Philadelphia tiene que ser la línea ofensiva. Wentz y Hurts fueron capturaron en 63 ocasiones durante la temporada 2020. Tanta presión y constante golpeo fue uno de los problemas para Wentz en los años recientes, en los que se vio mermado por las lesiones y en la reciente temporada afectó su efectividad, al sufrir 15 intercepciones; algo que también impactó en Hurts, quien también tuvo 4 pases que terminaron en manos de sus rivales.

La lesión del ala cerrada Zach Ertz también influyó para el bajo rendimiento por aire del equipo, que apenas promedió 207.9 yardas por partido. Durante los primeros cuatro años Wentz encontró en Ertz a su mejor aliado con tres mil 719 yardas y 26 touchdowns.

Las lesiones también afectaron al cuerpo de receptores del equipo, al grado de que esta temporada su mejor elemento fue Travis Fulgham, un agente libre que llegó en 2020 a Philadelphia, quien logró 538 yardas y cuatro anotaciones.

Del lado de la defensiva pueden estar más tranquilos en Philadelphia, ya que ocuparon el lugar 19 en yardas totales permitidas con 383.4 y permitieron 26.1 puntos por juego, para ocupar la posición 20 de la NFL; el problema radica en que apenas promediaron 20.9 puntos a favor por juego. Es probable que busquen retener los servicios de Nickell Robey-Coleman y Rasul Douglas, quienes se volverán agentes libres el próximo mes.

Una necesidad del equipo está en reforzar la posición de linebackers, una unidad a la que le anotaron 10 veces en la temporada en situaciones de pase y fue una de las peores cinco en coberturas de la NFL.

Es aquí donde empieza el verdadero problema ¿Cómo mantener gente cuando estás sobrepasado en el tope salarial? Philadelphia excede por 49.5 millones de dólares, según PFF. Hasta este lunes sólo han cortado al veterano DeSean Jackson, que les dio un colchón de 6 mdd y queda mucho por hacer todavía de cara a la agencia libre.

Con cada vez menos tiempo para maniobrar, el gerente del equipo, Howie Roseman tiene una tarea muy complicada, para regresar a la ciudad un equipo competitivo, pues en los últimos años la afición se acostumbró a ver a su equipo en los playoffs.