Los Packers hacen ajustes que ayudan al tope salarial

Las secuelas que dejará el 2020 ya empezaron a marcar la pauta para este año y la nueva temporada de la NFL, que inicia el próximo mes de septiembre. Si bien la liga aprendió a adaptarse bajo las circunstancias, ahora el golpe será en el tope salarial. Aún no es claro cual será el nuevo modelo, pero se estima que baje de $198.2 mdd a $180 mdd; por lo que los equipos tendrán que hacer malabares para ajustarse.

Los primeros en tomar riendas en el asunto fueron los Green Bay Packers. La franquicia subcampeona de la Conferencia Nacional llegó a un acuerdo con David Bakhtiari. El tackle, quien firmó durante la temporada un nuevo contrato, acordó convertir un bono de plantilla de $ 11 millones de dólares, a un bono por firmar.

El trato permite que el pago se distribuya en varios años, lo que crea un espacio de $8.3 mdd en el tope salarial del 2021 para los Packers. En el caso de Bakhtiari el limite máximo de $19.322 mdd se reduce a $11.01 mdd; pero aumenta su número limite para 2022 hasta 2024 en $2.768 mdd.

Con este movimiento, según Over the Cap, Green Bay está arriba del límite por $19.89 millones, por lo que lo del tackle fue apenas el primer intento para ajustarse, además de que no afecta al jugador; y para los Packers el dinero extra les viene bien para buscar firmar a los jugadores que entrarán como agentes libres esta primavera como: el corredor Aaron Jones y el centro Corey Linsley.

Los $105 mdd por cuatro años de Bakhtiari

A mediados del mes de noviembre, los Packers firmaron al tackle por las próximas cuatro temporadas y $105.5 mdd, un récord para cualquier jugador de su posición. El salario base es de $23 millones, mientras que el contrato incluye un bono por firmar de $30 mdd y otros de $30 mdd en bonos de roster en marzo. Este último es el que sufrió el ajuste para ayudar al tope salarial.

Las franquicias tendrán que buscar la manera de irse adaptando, después de sufrir el año más atípico en la historia de la NFL. Este es sólo el inicio.