NFL
Bears, sin identidad, se enfrentan a Chiefs
Aunque los Bears de Chicago revivieorn los uniformes de 1936, diistan mucho de ser aquel equipo con un ataque terrestre demoledor; Chief, el rival en turno.
Celebrando los 100 años de la NFL, Bears trajo de vueta los uniformes de 1936, sin embargo olvidaron retomar la actitud y golpeo de 1936. Chicago es la cuarta peor ofensiva terrestre en la liga, eso es difícil de digerir si eres aficionado de los otrora Monstruos de Midway. Los Bears carecieron este año de un líder en el juego terrestre que pudiera ser pintado como aquel Bronko Nagurski, quien en 1936 lideró a su equipo con 536 yardas en 11 juegos, ciclo en el que los Bears usaron la formación T para aplastar huesos con los linieros ofensivos Danny Fortmann y George Musso.
Ese fue el año en que los jugadores negros se encontraban aislados, segregados y no se les permitía jugar en el emparrillado. Cultura dolida que solía divertirse en el lado sur de Chicago, explotando la catarsis de la libertad nocturna representada en la pintura “Street Scene Chicago”, una obra llena de alegría conmovedora plasmada en 1936 por Archibald J. Motley Jr., que muestra damas y caballeros afroamericanos moviéndose con contorsiones al ritmo de Jazz en el vecindario de Bronzeville.
En 2019, Bronzeville continúa siendo un barrio de esencia afroamericana que observa a sus Bears, ahora a ritmo de hip-hop. Al entrar al penúltimo duelo de la temporada, Chicago debe usar sus unidades de combate para la guerra terrestre en el frente. Los Chiefs son la defensa número 26 contra la carrera. De alguna manera los Bears necesitan correr el balón. Esa es la única forma en que podrían competir contra la ofensiva de Andy Reid, consumiendo el reloj y manteniendo congelado a Patrick Mahomes, quien hasta ahora registra 3,606 yardas y 27 touchdowns.
La noche del domingo podría ser amarga para Bears, realmente amarga. Los fanáticos se quedarán fríos cuando la ofensiva aérea número 3 de la NFL comience a devorar a su defensiva, que ocupa el sitio No.13 contra el pase. Mahomes detectará los espacios en la defensa de los Bears y jalará el gatillo magníficamente, mientras sus guerreros lo protegen. La línea ofensiva de los Chiefs es la número 4 de la NFL en capturas permitidas. La ofensiva de Kansas City es explosiva.
Akiem Hicks, Eddie Goldman y Leonard Floyd podrían ser contenidos y Ha Ha Clinton Dixon podría perderse, por lo que el coach Pagano deberá apoyarse en los Pro Bowlers Eddie Jackson y Khalil Mack, que necesitan abrir el fuego con una intercepción o recuperar un balón suelto para un TD para permanecer en el juego.
Por otro lado, los Bears no están construidos precisamente como una poderosa maquinaria que lanza el balón. Son la ofensiva aérea número 25 de la liga y su línea ofensiva ocupa el lugar número 20 en capturas permitidas. Estos elementos no pueden ejecutar el ataque diseñado por el Coronel Nagy. Sus tanques ligeros parecen tan ineficientes como los vehículos de guerra obsoletos instalados por Marc Trestman y John Fox en el pasado.
Matt Nagy no despliega alas cerradas, esta temporada los cinco cerrados lograron en conjunto solamente 323 yardas en 42 atrapadas y 2 touchdowns. En comparación, Travis Kelce, de Chiefs, registró por sí solo 86 atrapadas para 1,138 yardas y 4 touchdowns.
El coach Nagy, lamentablemente, olvidó que los días de gloria de los Bears se construyeron sobre un sistema creado por George Halas para ganar las batallas más difíciles en las trincheras.
Bears se encuentra con marca de 7-7 y su sueño de llegar a los playoffs es una canción de jazz dolorosa, solitaria, que se ha esfumado como aquella pieza “Fore’ day rider” de Jay McShann. Kansas City dominará a Chicago 43-24.