Steelers dan muestra de vida ante los ateridos Bengals

Los Steelers y los Bengals de Cincinnati, dos equipos que no habían ganado en lo que va de la temporada se enfrentaron en el duelo de lunes por la noche de la Semana 4, con la única esperanza de no empatar y poder presumir su primer triunfo del año. Pittsburgh terminó por imponerse 27-3 a su rival divisional y con ello recuperaron un poco del oxígeno que perdieron las semanas anteriores.

Buen esfuerzo de Mason Rudolph

Mason Rudolph tiene qué madurar a base de golpes. El quarterback novato completó 24 de 28 pases para 229 yardas y dos touchdowns. Nada espectacular, pero no fue capturado y no entregó el ovoide, lo que ya es ganancia. Claro, enfrentó a una muy floja defensiva, pero se llevó su primer triunfo como profesional y evitó que los Steelers iniciaran con récord de 0-4 por segunda vez en 51 años.

Rudolph lució mucho más preciso hoy, pero cabe señalar que nunca buscó pases largos, en su mayoría buscó a sus receptores, principalmente a sus corredores, en trayectorias cortas hacia las bandas. Su envío más largo fue un pase de 43 yardas hacia Diontae Johnson en el tercer cuarto.

Wildcat Samuels

Para este partido, el entrenador de corredores de Pittsburgh, Eddie Faulkner, le sugirió al coordinador ofensivo Randy Fichtner que probaran la jugada wildcat. La ventaja que tenían es que el corredor Jaylen Samuels estaba acostumbrado a ese sistema que empleó durante su paso por el futbol americano colegial, en North Carolina State.

Definitivamente fue algo que no se esperó la defensiva de Bengals. Cincinnati sufrió para adivinar lo que haría Samuels, quien en formación escopeta, ocupó la posición de quarterback. De esta forma tenía tres opciones: lanzar un pase, fintar carrera personal y otorgarle el ovoide al otro corredor (James Conner) o cruzar la línea de golpeo por piernas.

Samuels cooperó con 134 yardas ofensivas y una carrera de dos yardas. Corrió para 26 yardas en 10 acarreos, atrapó ocho pases para 57 yardas y completó tres pases para 31 yardas.

Los Bengals no son sinodal

Steelers no puede echar las campanas al vuelo. Con todo respeto, pero los Bengals son Nemo (nadie). La línea ofensiva de Cincinnati tiene más agujeros que la Avenida Central en Ecatepec. Andy Dalton fue capturado ocho veces. Además, debe sentirse muy frustrado al ser el sexto mejor quarterback de la liga, con 1,150 yardas por pase, pero sin poder ganar.

Los Bengals tienen la defensiva 24 de la NFL al conceder 386.2 yardas por partido. A los Steelers les cedieron 326 (260 por pase y 66 por carrera). Al ataque simplemente no le quitan el sueño a nadie, son la ofensiva 27 al generar 306.5 por partido.

Además, el coach Zac Taylor debe acostumbrarse a la frustración. Por lo pronto se convirtió en el segundo entrenador de primer año con Cincinnati que inicia con marca de 0-4. El anterior fue Sam Wyche, quien en 1984 arrancó la campaña 0-5, pero que terminó con foja de 8-8.