La lesión que terminó con la temporada de J.J. Watt

El ala defensiva de los Houston Texans, J.J. Watt, sufrió la ruptura del pectoral, una lesión común entre los jugadores de la NFL, y se perderá el resto de la temporada 2019.

La función del músculo pectoral es la de mover el brazo (hueso húmero) principalmente en la aducción (movimiento que acerca el brazo al cuerpo). Este músculo de inserta en el húmero (hueso del brazo) y la ruptura sucede cuando su tendón se rompe en esta zona. Su ruptura es común en los jugadores de football americano sobre todo en los linieros (defensivos / ofensivos) debido al volumen muscular y al esfuerzo que realizan con los brazos.

Al momento de la ruptura existe dolor en el brazo así como limitación de la movilidad del mismo. El atleta debe del diagnosticado de inmediato y retirado del terreno de juego para evitar una lesión mayor. El diagnóstico se sospecha clínicamente y se corrobora con estudios de imagen como ultrasonido y resonancia magnética.

El tratamiento siempre es quirúrgico en los jugadores de futbol americano, ya que es la única forma de poder reconstruir en forma correcta el tendón y proporcionar de nuevo la función completa. La cirugía consiste en unir el tendón al húmero (por medio de suturas) para que pueda cicatrizar en el lugar correcto. El tendón tarda en cicatrizar aproximadamente 6 a 8 semanas y posteriormente se deberá realizar una correcta rehabilitación para reintegrar al atleta en forma completa a su nivel óptimo de juego.

Ésta lesión no significa el fin de la carrera deportiva de J.J. Watt, nombrado tres veces Jugador Defensivo del Año (2012, 2014 y 2015), así como elegido cinco veces al Pro Bowl, pero debe ser tratada por un especialista para que el jugador pueda recuperar su capacidad atlética.

Dr. Rodrigo Gutiérrez Corona “El Curandero”

Cirujano Ortopedista y Traumatología Ortopédica

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