Chicago Bears ya cuidan otro accidente de pateadores

Los Chicago Bears no piensan volver a cometer un error que los deje fuera de postemporada. Los pupilos de Matt Nagy impactaron a propios y extraños durante la temporada regular y parecían un peligro de cuidado para cualquier que se los enocntrase en los playoffs de la Conferencia Nacional. Desafortunadamente, la historia terminó abruptamente de otra manera.

El Soldier Field vivía un calor incomprensible gracias al apoyo de la gente en el duelo entre Bears y los Philadelphia Eagles. Philly, a pesar de ello, no se contuvo y vio la manera de retener la ofensiva local. El encuentro no pintaba nada bien para Mitch Trubisky, pero en el último cuarto lograron acercarse en el marcador y todo dependía de una patada.

Todo estaba listo; 43 yardas separaban a Cody Parkey de darle una alegría única a la gente de Illinois. Se prepara, le acomodan el ovoide y lo bloquean. El Soldier Field se vino abajo. El silencio congeló a la ciudad. El gran año de los Bears desapareció en una patada errónea.

Esa fue la manera en que Parkey se dio a conocer ante las franquicias, medios y fanáticos de la NFL. Por supuesto que no fue de la mejor manera y las cabezas de Chicago se lo han dejado en claro con la última contratación de la institución.

El viernes 25 por la mañana, Halas Hall recibió a distintos jugadores en su posición para hacer pruebas, por lo que, después de unas horas en la oficina, una decisión fue tomada.

Nick Folk, el antiguo jugador de los New York Jets se encontraba ahí, pero el no fue eleigido. El nuevo hombre de confianza para Nagy, hasta ahora, será Redford Jones, un personaje que no ha tenido un solo golpe en la NFL.

Se reporta que esta contratación estará dejando a Parkey a un lado, pero, hasta el momento, Chicago no ha señalado algún movimiento con respecto a su integrante de Jupiter, Florida.