El coraje del gigante Will Hernandez

El juego de ajedrez en movimiento es interrumpido por los silbatazos que chillan en la práctica de los Giants. El guard ofensivo novato de la Universidad de Texas en El Paso, Will Hernández, se enfrasca en una pelea a puños contra el salvaje Damon Harrison, líder de la defensa neoyorquina. Hernandez mide 1.88m y pesa 160 kilos, es hijo de Angélica Lemus y Roberto Hernández, ex jugador mexicano de fútbol soccer. Will es ejemplo del coraje que se necesita en las trincheras, él vibra jugando con el nivel de violencia al máximo. Will inició labrando su camino en el deporte como Gloria Anzaldúa lo plasma en su texto Borderlands / La Frontera:

“Debajo del cielo de hierro niños mexicanos patean su balón de fútbol, corren tras él, ingresando a los Estados Unidos”

Por su ostentosa corpulencia Hernández cambió el fútbol soccer por el fútbol americano, jugó con los Cowboys de la Preparatoria Chaparral en Las Vegas. Troyanos de USC y Diablos del Sol de Arizona State lo necesitaban pero su nivel académico no le permitió enrolarse en una universidad de la Conferencia PAC 12.

“Y si me niegan el regreso a casa, tendré que pararme y reclamar mi espacio, creando una nueva cultura, una cultura mestiza, con mi propia madera, mis propios ladrillos y cemento”.

Hernández aprovechó la oportunidad que le brindó el Coach Sean Kugler de jugar en la NCAA con UTEP y abrió 49 juegos como guard con los Mineros, equipo que en 2014 y 2015 fue primer lugar de la Conferencia USA en menos capturas permitidas. Will fue nombrado AP All-America en dos años consecutivos: 2016 y 2017.

Con Will inicia la reestructuración de la línea ofensiva de los Giants que permitió 34 capturas en la temporada 2017. En el ajedrez del Coach Pat Shurmur Hernández será una torre protegiendo al apabullado rey Eli Manning y se desplazará en bloqueos de trampa abriendo huecos para el RB novato de Penn State, Saquon Barkley. A Will le hierve la sangre por jugar en el MetLife Stadium. El proceso de migración de su familia lo convirtió en jugador despiadado de fútbol americano, que hoy sueña y pelea con la visión firme de ser primer equipo y triunfar en la NFL.