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Mexicanos cambian grito homofóbico por aplausos
Uno de los temores más grandes de la NFL y las autoridades con respecto al partido en México era el grito homofóbico. En el juego del año pasado entre los Texans y los Raiders se hizo presente el tradicional grito que se hace presente en el futbol cuando despeja un portero; en este caso, lo hicieron durante las patadas de salida. Afortunadamente, este año todo cambió y esa acción no se llevó a cabo el 19 de noviembre.
Arturo Olivé, director de NFL México, mencionó en días anteriores que esperaba que los asistentes al Estadio Azteca no hicieran el famoso grito por el cual han surgido diversas controversias tanto en el futbol como en el americano. Aunque la Federación Mexicana de Futbol (FMF) ha tratado de erradicar el grito, sus esfuerzos han sido infructíferos, por lo cual la idea de que llegara al enfrentamiento entre Patriots y Raiders estaba latente.
Mientras cada una de las personas tomaba su asiento para disfrutar del partido, la especulación acerca de si el grito se haría presente o no, crecía. Stephen Gostkowski colocó el ovoide en el terreno de juego, retrocedió unas cuantas yardas, volteó a ambos lados para confirmar que sus compañeros estuvieran listos, pateó el balón y, los aplausos y gritos de emoción desplazaron al grito homofóbico.
Durante el encuentro, en las diversas actuaciones de los pateadores de ambos equipos el grito de “eeeehhh… p…” sonó únicamente en algunas zonas, pero no al unísono como en ocasiones anteriores. Afortunadamente los que intentaron alzar la voz para emanar ese par de palabras ofensivas, fueron opacados por los gritos de emoción y aplausos por parte de la mayoría de los asistentes.
Además de estas acciones, la NFL también promovió en los altavoces que los aficionados se comportaran adecuadamente. La liga trató de empatizar con los fanáticos y durante el medio tiempo hizo un homenaje a los que trabajaron en las labores rescatistas durante el sismo del pasado 19 de septiembre. La gente se conmovió y entendió que debían comportarse a la altura de como lo estaba haciendo la liga.