NFL
Matthews o Long; un padre verá a su hijo ser campeón
“El sueño del héroe, es ser grande en todas partes y pequeño al lado de su padre.” Víctor Hugo.
Los jugadores de los Falcons y los Patriots llegan al Super Bowl LI como héroes, por lo hecho en la temporada y por haber alcanzado uno de los máximos logros como jugador de NFL.
Dos jugadores en especial llaman mi atención. Dos jóvenes que decidieron seguir los pasos de sus respectivos padres y dos padres que quizá nunca imaginaron ver a sus hijos disfrutando este momento. De entre todas las profesiones existentes, de entre todos los deportes disponibles en la universidad, de entre las muy pocas posibilidades de llegar a la NFL y contra todos los pronósticos, el Super Bowl LI tendrá a dos hijos de leyendas de la NFL que tomaron la decisión de jugar fútbol americano, tal como sus padres y que han logrado lo mismo que ellos hace varios años… llegar a un Super Bowl. Será la décima sexta y décima séptima ocasión que esto sucede.
La vida de Jake Matthews (liniero ofensivo de Falcons) y Chris Long (ala defensivo de Patriots) desde pequeños sin duda giró en torno al fútbol americano. No podría ser de otra manera teniendo como padres y ejemplo a Bruce Matthews y a Howie Long. Ambos leyendas, miembros del Salón de la Fama. Comencemos con sus historias.
JAKE Y BRUCE MATTHEWS
La historia de Jake Matthews y su padre Bruce es un tanto curiosa.
Para quienes no saben de Bruce Matthews, fue un extraordinario OL, muchos alegan uno de los mejores de la historia. Protegió a Warren Moon y Steve McNair; abrió huecos para Earl Campbell y Eddie George. Fue parte de los Tennessee Titans que participaron en el Super Bowl XXXIV.
Tanto Bruce como Jake fueron seleccionados en la primera ronda de Draft. El padre en 1983 con la novena selección global y el hijo treinta y un años después en 2014 con la sexta.
En esta vida las cosas no suceden nada más porque si, al menos eso creo firmemente. Todo sucede por algo, con algún propósito. Saber cuál, es parte de ese misterio llamado camino de vida.
Jake Matthews consiguió su pase al Super Bowl en el último juego en la historia del Georgia Dome. Mismo estadio en el que su padre jugó su único Super Bowl.
De hecho, Jake recuerda muy bien ese momento, con sólo nueve años de edad estuvo en el Georgia Dome viendo a su padre disputar el juego más importante de su carrera sin siquiera pensar que en ese mismo sitio y diecisiete años después conseguiría el boleto al juego más importante de su corta carrera.
En entrevista para el Atlanta Journal-Constitution, declaró que cuando fue seleccionado por los Falcons automáticamente pensó en lo increíble que era ir al Georgia Dome a ver juegos de NFL, incluyendo obviamente el Super Bowl XXXIV.
Pero hay otra conección en esta historia. Jake Matthews disputará el Super Bowl en casa, en Houston. La ciudad en la que su padre jugó más de quince años de su carrera y donde se convirtió en leyenda. El 5 de febrero, esa misma ciudad podría ser testigo como el hijo de uno de sus héroes deportivos gana lo que él no logró, ganar un Super Bowl. Mejor escenario, imposible.
Jake jugará el Super Bowl en su tercer año de carrera, mientras que a su padre le costó diecisiete años. Si alguien sabe cuanto cuesta llegar a un juego grande y que quizá sea una oportunidad que se presenta una sola vez en al vida, ese es Jake Matthews.
Además, para Jake el camino no ha sido sencillo sobretodo al haber tenido que enfrentar a un primo hermano en el Juego de Campeonato. Para poder disputar el juego en Houston, tuvo que derrotar a Clay Matthews, LB de los Packers, lo que seguramente le asegurará algunas disputas familiares, al menos en broma. Lo que era un hecho era que habría un Matthews jugando en el Super Bowl. El destino le sonrió a Jake.
CHRIS Y HOWIE LONG
Chris es hijo del legendario Howie Long, ala defensivo de los Raiders de 1981 a 1993. Dominante en su posición, obtuvo los méritos suficientes para ser inducido al Salón de la Fama en el 2000.
Cuando Chris fue seleccionado por los Rams en 2008, muchas de las esperanzas de jugar un Super Bowl como su padre probablemente se desvanecieron. Sin embargo, al ser contratado esta temporada por los Patriots, las esperanzas renacieron después de ocho años de carrera.
De hecho para su padre, esta contratación fue como el regreso a casa pues nació y creció en Boston, especificamente en Somerville y Charlestown, Massachusetts respectivamente. Sus declaraciones así lo hacían ver al declarar que tardó un poco más de lo que él había pensado, pero que un Long en uniforme de los Patriots se vería muy bien.
Padre e hijo sabían que era una oportunidad de oro para el legado no solo de Chris sino del familiar. Howie pensó que el cambio beneficiaría a su hijo al declarar para ESPN que Chris era un tipo de jugador para Patriots. De hecho, agregó “En este punto de su carrera, ¿para qué juegas? Juega para tener una oportunidad de ganar. Es una organización, que en los últimos 15 años han ganado trece campeonatos divisionales y han estado en seis Super Bowls, ganando cuatro. Estuvieron muy cerca de ganar los otros dos. Así que si quieres tener una oportunidad de volarte la barda, allá hay abundancia”.
Inclusive, el padre afirmó que su hijo dejó de lado el aspecto económico para firmar con los Patriots y buscar el sueño de ser campeón. La estrategia le funcionó a Chris y está a solo un paso de conseguir un anillo de campeón, tal como su padre.
Así, Chris llegará al Super Bowl en su novena temporada como profesional; algo que su padre consiguió en su tercera. Lo mejor de todo, jugando para el equipo al que seguramente su padre de niño, seguía.
Así es el destino, inesperado pero impulsado por nuestras propias decisiones.
¿Podrá Jake Matthews conseguir lo que tanto anhelaba su padre? ¿Será Chris Long el que se unirá al suyo como campeón de un Super Bowl? Sólo uno conseguirá el objetivo final. Todo se decidirá el 5 de febrero.
Estas dos duplas de padre e hijo se convertirán en la décimo sexta y décimo séptima que llegan a un Super Bowl. ¿Las otras antes de ellos?
Padre: Julius Adams, DE, New England (XX)
Hijo: Keith, LB, Philadelphia (XXXIX)
Padre: Perry Brooks, DT, Washington (XVII, XVIII)
Hijo: Ahmad, LB, San Francisco (XLVII)
Padre: Ross Browner, DE, Cincinnati (XVI)
Hijo: Max Starks, T, Pittsburgh (XL, XLIII)
Padre: Jeremiah Castille, S, Denver (XXII)
Hijo: Tim, FB, Arizona (XLIII)*
Padre: Craig Colquitt, P, Pittsburgh (XIII, XIV)
Hijo: Britton, P, Denver (XLVIII)
Padre: Frank Cornish, DT, Miami (VI)
Hijo: Frank, C, Dallas (XXVII, XXVIII)
Padre: Bruce Davis, T, Oakland-L.A. Raiders (XV, XVIII)
Hijo: Bruce, LB, Pittsburgh (XLIII)*
Padre: Steve DeOssie, LB, N.Y. Giants (XXV)
Hijo: Zak, LB, N.Y. Giants (XLII)
Padre: Tony Dorsett, RB, Dallas (XII, XIII)
Hijo: Anthony, CB, Tennessee (XXXIV); Oakland (XXXVII)
Padre: Guy Frazier, LB, Cincinnati (XVI)
Hijo: Andre, LB, Pittsburgh (XLIII)
Padre: Bob Griese, QB, Miami (VI, VII, VIII)
Hijo: Brian, QB, Denver (XXXIII)*; Chicago (XLI)*
Padre: Don Hasselbeck, TE, L.A. Raiders (XVIII)
Hijo: Matt, QB, Seattle (XL)
Padre: Emery Moorehead, TE, Chicago (XX)
Hijo: Aaron, WR, Indianapolis (XLI)
Padre: Jackie Slater, T, Los Angeles Rams (XIV)
Hijo: Matt, WR, New England (XLVI, XLIX)
Padre: Mosi Tatupu, RB, New England (XX)
Hijo: Lofa, LB, Seattle (XL)
Padre: Manu Tuiasosopo, DT, San Francisco (XIX)
Hijo: Marques, QB, Oakland (XXXVII)
(*No tuvo participación en el juego.)