NFL
Sam Bradford parece haber encontrado su redención
Sam Bradford parece haber encontrado el sitio perfecto para explotar todas sus cualidades. El pasador de Minnesota, es, junto a Carson Wentz y Trevor Siemian, los únicos invictos en lo que va de temporada.
Justo cuando muchos ya poníamos a Bradford como un miembro más de la extensa lista de petardos que ha llegado a la NFL, el ex jugador de lo Sooners de Oklahoma ha encontrado el lugar idóneo para redimirse como quarterback.
El veterano de séptimo año pasó, en unas cuantas de semanas, de ser el abridor de Filadelfia de cara al 2016 a vestirse con el uniforme de los Vikingos de Minnesota y vaya que lo ha hecho bien.
En tres juegos como titular tiene el tercer mejor porcentaje de pases completos con el 69.5, además del tercer mejor rating, el cual es de 105.5.
En sus tres aperturas ha lanzando pata 719 yardas, cuatro envíos de anotación y cero intercepciones. De continuar con la misma línea podría romper sus propias marcas, incluso la de más victorias. Bradford alcanzó siete triunfos en las temporadas 2010, 2012 y 2015.
Quizá lo que Sam necesitaba era pertenecer a un equipo contendiente, un equipo con verdadero talento en la mayoría de las lineas.
Con San Luis siempre hubo reestructuraciones y nunca pudieron encontrar elementos que aportaran talento y su único año con Filadelfia le tocó una época de reconstrucción.
Ahora en Minnesota, y sin Adrian Peterson, se ha convertido en una pieza fundamental. Sam parece que ha vencido a esos fantasmas que lo etiquetaban como un mal pasador, pero hay uno más al que todavía debe vencer: las lesiones.
Si lo hace podríamos estar hablando de la mejor temporada en la carrera de un jugador que a nivel fue condecorado con el Trofeo Heisman.