Super Bowl
La maldición del equipo sede
Una de las maldiciones más famosas en la NFL es la del equipo sede del Super Bowl.
En las 49 ediciones que se han jugado, ningún equipo ha estado en un Super Bowl en casa.
Los únicos equipos que podido ver acción en su área, más no en su estadio, son los Los Ángeles Rams, que jugaron el SB XIV en el Rose Bowl de Pasadena ante los Steelers (los Rams jugaban en el Los Ángeles Memorial Colliseum, a 25 minutos del Rose Bowl) y los San Francisco 49ers, quienes llegaron al SB XIX en el estadio de la Universidad de Stanford (a 35 minutos del Candlestick Park) ante los Miami Dolphins.
¿Qué ha pasado en los últimos diez años con los equipos de la ciudad sede del “gran juego”?
En 2005, los New England Patriots vencieron a los Philadelphia Eagles en Jacksonville.
Esa temporada, los Jaguars terminaron 9-7, segundos en su división, sin calificar a playoffs.
Para 2006, el Ford Field de Detroit recibió a los Pittsburgh Steelers y los Seattle Seahawks.
Los Lions culminaron la campaña con marca de 5-11, incluyendo el despido del en ese entonces Head Coach, Steve Mariucci.
Peyton Manning levantó su único trofeo Lombardi en 2007 en el Dolphin Stadium de Miami, cuando los Indianápolis Colts vencieron a los Chicago Bears.
Los Dolphins tuvieron una campaña de únicamente seis victorias, que terminó con Nick Saban marchándose de la Florida rumbo a la universidad de Alabama.
El estadio de la Universidad de Phoenix será recordado por albergar en 2008 la mítica recepción de David Tyree en el Super Bowl XLII, donde se enfrentaron Patriots y Giants.
Los Arizona Cardinals terminaron a dos victorias de ganar la NFC West (ganada por los Seahawks) y a una de clasificar como Wild Card (boleto tomado por los Redskins).
Para 2009, el Raymond James Stadium de Tampa Bay recibió a Steelers y Cardinals en el SB XLIII. Los Buccaneers entraron al último mes de temporada con nueve victorias y una oportunidad seria de entrar a la postemporada. Sin embargo, en diciembre perdieron sus cuatro encuentros restantes, quedando en tercer lugar de la NFC South, siendo despedidos el Head Coach, Jon Gruden y el GM Bruce Allen.
Para 2010, Miami recibió nuevamente el juego por el campeonato, donde los Saints derrotaron a los Colts. Los Dolphins culminaron 7-9, quedándose a dos victorias de puestos de comodín.
El área de Dallas-Fort Worth fue sede por primera vez del Super Bowl en febrero de 2011. Los Packers vencieron 31-25 a los Steelers.
Una de las temporadas más turbulentas para los Dallas Cowboys en los últimos años, con Wade Phillips siendo despedido a media temporada, terminando con Jason Garrett como interino. El equipo de la “estrella solitaria” tuvo una marca de 6-10, empezando esta misma con 7 derrotas en sus primeros 8 encuentros.
El Super Bowl XLVI viajó a Indianapolis, en el cual los Giants vencieron nuevamente a los New England Patriots.
A principios de temporada, Peyton Manning sufrió una lesión de cuello, la cual le impidió jugar toda la temporada, por lo cual los controles del equipo fueron tomados por Kerry Collins y Curtis Painter. Los Colts terminaron 2-14, su peor récord en la historia de la franquicia.
Será recordado en Super Bowl XLVII, además de la victoria de los Ravens sobre los 49ers, por el apagón en el tercer cuarto en el Superdome de Nueva Orleáns, y por haber tenido por primera vez en la historia de la NFL a dos hermanos como Head Coaches de los equipos finalistas, John y Jim Harbaugh.
Sin embargo, para el equipo de la ciudad sede, los Saints, fue un desastre debido al “Bounty Gate”, por el cual su entrenador en jefe, Sean Payton fue suspendido por toda la temporada.
Los Saints consiguieron una marca de 7-9, siendo eliminados de la persecución por postemporada en la semana 16.
El Metlife Stadium tuvo como invitados a los Seattle Seahawks y Denver Broncos en el SB XLVIII. Uno de los “dueños” del estadio, los Jets, terminaron con marca de 8-8, quedándose a una victoria del Wild Card de la AFC, mientras que el otro “dueño”, el equipo de los Giants, empezó la temporada con seis derrotas al hilo, culminándola con marca de 7-9, sin acceder a playoffs.
Para esta edición del Super Bowl en Arizona, por primera vez en 10 años el equipo sede del Super Bowl accedió a postemporada.
Los Arizona Cardinals controlaron su división por más de diez semanas, hasta que la lesión de su mariscal titular Carson Palmer y el repunte de los Seahawks frenaron a los de Arizona, conformándose así con el Wild Card.
El sueño del equipo local terminó en la primera ronda de los playoffs, cuando los Cardinals sin sus dos primeros mariscales (Palmer y Drew Stanton) sucumbieron en Charlotte ante los Carolina Panthers.
¿Podrán en los próximos años 49ers, Texans o Vikings terminar con esta maldición?