Medirán potencia Clemson y Ohio State

Urban Meyer de Ohio State nunca ha tenido problemas para aclimatarse a los escenarios más importantes del futbol colegial.

Al parecer, Dabo Swinney de Clemson también se siente cómodo bajo los reflectores.

Meyer ha sido el entrenador de cuatro partidos anteriores de la Serie de Campeonato de Tazones, (BCS por sus siglas en inglés), y nunca ha perdido.

Swinney logró una vez más que su equipo participara en la BCS, pero perdió por 37 puntos.

Por supuesto, al llegar el viernes por la noche, nada de eso va a importar.

Los Buckeyes, que ocupan el séptimo lugar y tienen un récord de 12-1 y los Tigres, que están en el doceavo lugar con una marca de 10-2, estarán al mismo nivel en el Tazón de la Naranja, en donde Meyer tratará de mantener un récord perfecto en la BCS y Swinney tratará de que su equipo, como él lo dijo, “siga escalando la montaña”.

“Cuando uno tiene la oportunidad de llegar a un partido de la BCS y lo pierde, lo que uno desea es regresar y tener otra oportunidad”, comentó Swinney ayer.

“Creo que sólo quedan seis equipos en el país que han competido en dos Tazones de la BCS en los tres últimos años, nosotros somos uno de ellos. Así que, es una gran oportunidad para nosotros el tener la oportunidad de ganar uno”.

Meyer podría decir lo mismo.

Su equipo tenía planeado jugar en Pasadena, California., en el campeonato nacional de la BCS que se efectuará la próxima semana, pero la derrota en el partido en donde se disputó el título de la Big Ten –el primero bajo la dirección de Meyer en 25 partidos desde que se hizo cargo del equipo en Columbus– eliminó la posibilidad que tenían los Buckeyes de competir por el título.

Así que, en lugar de eso, Ohio State se dirigirá al sur de Florida, en donde Meyer tratará de agregar al Tazón de la Naranja a su colección de la BCS que ya incluye dos victorias en partidos por el título y un triunfo en el Tazón de Azúcar en Florida y una victoria en el Tazón Fiesta cuando era entrenador de Utah.

“Es una oportunidad para competir”, comentó Meyer.

“No importa si lo hacemos en un juego de mesa, vamos a tratar de ganar el partido. Siempre que anotamos, nuestro objetivo es ganar. Es la mentalidad que tratamos de crear dentro de nuestro programa. Ya sea que se trate del Tazón de la Naranja o el octavo partido de la temporada, siempre queremos ganar”.

Hace dos años, Clemson perdió el Tazón de la Naranja ante West Virginia por marcador de 70-33 –el partido cambió cuando los Tigres perdieron la posesión del balón en el segundo periodo, una jugada con la que hubieran conseguido la ventaja.