De Tocho
Los pronósticos para la Ronda de Comodines
Si la última semana de 2013 de alguna forma es un indicativo de lo que viene en el nuevo año, entonces los casinos, los ‘bookies’ y uno que otro merenguero ya se amolaron, porque DeTocho viene ‘reloaded’. Eso es lo que me hace pensar mi marca de 14-2.
De la misma manera también se van a tener que aguantar mis amigos, mis colegas y la señora DeTocho, porque hoy me creo mucho. Claro que para bajarme de la nube solo falta recordarme que mi equipo no está en playoffs. ¡Pum! Así de fácil. Bye bye sonrisa.
Pero podría ser peor… Podría irle a Dallas.
En fin, como mi equipo está eliminado, dedicaré las siguientes tres semanas a ser el emisor de las malas noticias, rompiendo el corazón de aquellos que aún tienen esperanza y que tarde o temprano correrán la misma suerte que mi equipo y yo.
Llegaron los playoffs, esos momentos en los que el football se pone serio y yo también. Las bromas serían para mejor ocasión.
Por lo pronto, las primeras cuatro víctimas. Con ustedes, los pronósticos de los playoffs en su ronda de comodines.
KANSAS CITY EN INDIANÁPOLIS: Estos dos equipos parecen bien podrían encontrarse en un casting para el Dr. Jeykill y Mr. Hyde. Los Jefes comenzaron ganando sus primeros nueve encuentros y se mostraron como un bastión defensivo. Después, como ha sido el común denominador con muchos, llegó Denver y los descompuso.
Por el otro lado, los Colts comenzaron la campaña como una máquina de football. Le pegaron, y sin muchos problemas a San Francisco, Seattle y Denver y estuvieron un buen rato en la conversación para ser considerados el mejor equipo de la NFL. Después se rompió Reggie Wayne y la vida no volvió a ser la misma.
Ahora, estos dos se vuelven a encontrar, dos semanas y un triunfo de los Colts de 20-7 más tarde. Indy esta reencontrando su identidad, que es la de acosar al pasador rival y dejar que Andrew Luck haga el resto. Kansas, por otro lado, dejó de hacer lo suyo: dominar con defensa y dejar que Jamaal Charles haga lo suyo, por lo que explica, en parte, porque perdieron cinco de sus últimos siete juegos.
Pese a que son los Potros el equipo que llega en mejor momento, algo siempre valioso en playoffs, es Kansas City el equipo más saludable en el momento indicado. Los Jefes saben ganar fuera de casa, tienen la fórmula perfecta de playoffs, ya saben esa de correr el balón y jugar defensa. Fórmula que funciona mejor ante un equipo propenso a iniciar lento. PRONÓSTICO: KANSAS CITY 24-17 INDIANÁPOLIS
NUEVA ORLEÁNS EN FILADELFIA: Los Santos fueron uno de esos equipos que todo el mundo quería ver en campaña regular. Una dinámica ofensiva, una defensa oportuna y dirigidos por una de las grandes mentes ofensivas de su generación. Filadelfia, por decirlo de alguna manera, era la versión de bolsillo de Nueva Orleáns.
Al inicio de la campaña, todos sabíamos qué esperar de los Santos, un potente ataque y muchas dudas en la defensa. Esas son dos cosas más de las que sabíamos de las Águilas, que con la llegada de Chip Kelly se convirtieron en el póster de los equipos enigmáticos.
Todo eso se mantuvo reflejado en una marca inconsistente durante las primeras seis semanas hasta que llegó la inevitable lesión de Michael Vick, una que le abrió las puertas a Nick Foles y que iluminó el futuro de Filadelfia.
Con Foles en los controles, no sólo le pueden competir a Santos en un mano a mano ofensivo. Sino que tienen un control real del encuentro. Saben que no van a regalar balones, saben que el balón estará burilen repartido y saben que habrá jugadas por tomar en el largo yardaje.
Eso podría significar demasiado para unos Santos que fuera de casa simplemente no fueron los mismos. Su potente ataque fue extinguido por equipos que pueden jugar defensa y, aunque este no es el caso, Brees y compañía recientes mucho dejar la seguridad del domo, especialmente si han de meterse al frío.
¿O qué no se acuerdan de su última visita en los playoffs? Cuándo fueron a Seattle a jugar el papel de verdugos de un equipo con marca de 7-9, sólo para ser ellos mismos los que terminarían caminando por el tablón.
Esa es una historia familiar en Nueva Orleáns, que no conoce el triunfo de postemporada jugando en patio ajeno. Nunca lo han visto, pero si hay una buena oportunidad es esta. Pero Rob Ryan se va a tener que ganar su cheque, porque para Brees no va a ser sencillo y va a necesitar ayuda. PRONÓSTICO: NUEVA ORLEÁNS 27-24 FILADELFIA
SAN DIEGO EN CINCINNATI: Cuando llega la postemporada, es fácil, incluso puede decirse que es obligatorio, olvidarse de los Bengalíes. Al rinde cuenta, han dado pocos motivos para ser recordados, a menos que uno tenga una cosa por recordar corazones rotos.
Este año es distinto. Cincinnati no ha ganado en playoffs en 23 años, pero este es el año que lo cambia todo. Tener un partido en casa te da esa confianza. Y para los Bongos no es cosa menor, luego de acabar invictos en su patio, y más importante aún, luciendo como una potencia, como un equipo de football redondo y una fuerza de la cual deben cuidarse.
En especial San Diego, un equipo que tal vez se haya acabado su dosis de milagros tan solo por acceder a los playoffs, siendo llevados a tiempo extra, con la temporada en la línea, por un equipo de reservas. Sin duda, una tarjeta de presentación que no quieres tener.
Philip Rivers, sin mucho ruido, tuvo una de las temporadas más sólidas alrededor de la liga y poco a poco su elenco de reparto comienza a rendir a la altura, pero necesitan más que eso ante una defensiva que es de elite y plagada de talento en todas sus líneas.
En tanto Andy Dalton necesita separarse de la horrible etiqueta que lleva consigo el ser un quarterback de Cincinnati en playoffs. No lo ha podido hacer en sus últimos dos años, en los que fueron debut y despedida de postemporada.
Pero este es el año en el que Cincinnati luce diferente. La dosis de talento alrededor de Dalton realmente luce especial: Green, Green-Ellis, Bernard, Eifert, Gresham, Jones. Demasiado para cualquiera, incluso para un equipo con línea directa a San Judas, como San Diego. PRONÓSTICO: CINCINNATI 33-20 SAN DIEGO.
SAN FRANCISCO EN GREEN BAY: El plato fuerte se sirve frío. Y no, no es que se me hayan cruzado los cables a la hora de los clichés y los dichos populares. Es sólo que si algo pasa en enero por Lambeau invariablemente estará congelado y el juego de la semana no es la excepción.
Por un lado, tenemos a San Francisco. El campeón defensor en la NFC, que ya sabe lo que tiene que hacer para ganar en enero. Un equipo bien dirigido, enrachado y con un quarterback como Colin Kaepernick, que trae de hijos a los Packers.
Por otro lado, tenemos a Green Bay con su quarterback de calibre MVP sano y fresco. Un equipo veterano que ya ha levantado el Lombardi y está consciente de que en enero se gana con algo más que football. Un equipo con hambre de respeto y quizá lo más importante en estas fechas, una auténtica ventaja de local… O como le quieran llamar a jugar a 20 grados bajo cero.
Ahora, el punto aquí es averiguar cuáles de estos factores son más importantes y pesan más para las causas de sus equipos.
Kaepernick ha despedazado a la defensiva de Green Bay en sus dos enfrentamientos previos, primero por tierra en los pasados playoffs, y segundo por aire en el primer juego de esta campaña. Pero hay un pequeño detalle. Kaepernick no lo ha hecho en las condiciones en las que estarán la tarde del domingo.
Ahora, Rodgers está de regreso detrás del centro, sin mucho desgaste físico y la mente despejada. El pequeño detalle es que los siete frontales de los 49ers son capaces de cambiar ambas cosas con un solo golpe y la ayuda de Eddie Lacy será sufrida y escasa ante una defensa del calibre de la de San Francisco.
Green Bay no tiene, ni cerca, a una defensiva dominante, pero tiene la capacidad ofensiva para convertir el juego en un tiroteo y en ese terreno, no hay muchos mejores que Rodgers. PRONÓSTICO: GREEN BAY 34-30 SAN FRANCISCO.
LA SEMANA PASADA: 14-2
EN LA TEMPORADA: 154-85