El futuro de los Steelers por @DeTocho_mx

Luego de ejercer todos mis poderes de maldición sobre los Patriotas tras el blog del pasado martes, muchos de ustedes me pidieron, suplicaron e incluso ofrecieron fuertes cantidades de alcohol para alejar mi blog de su equipo favorito.

Concedido, hablaré del mío entonces.

No, no les hago ningún favor, me lo estoy haciendo a mi. Y es que después de la patética exhibición del domingo en el Palacio de Jerry, terminé con un coraje atravesado que me ha sido imposible sacar.

O tal vez estaba esperando este momento.

Desde el término del partido ante Dallas, he leído a muchos aficionados del equipo buscando culpables, excusas y esperanza.

Algunos culpan a Ben Roethlisberger, quien a la vez culpa a Todd Haley.

Otros apuntamos el dedo hacia Antonio Brown y ese fumble a menos de ocho minutos del final.

Como excusas, la más común fueron las lesiones. Aunque sigo sin entender de quién, pues fuera de Ike Taylor y un par de gordos de la línea ofensiva, el equipo estaba completo.

La esperanza, por otro lado, está intacta.

Aún con lo dolorosa de la derrota, los Steelers controlan su destino. Triunfos ante Cincinnati el domingo y contra Cleveland en 15 días ponen a Pittsburgh en la postemporada.

Pero aquí es donde se pone sabroso el asunto.

Con la manera en que están jugando, ninguno de esos dos juegos parece algo sencillo, particularmente el de los Bongos del próximo domingo.

La esperanza radica en que se han sacado triunfos fuera de casa ante Gigantes (8-6), Baltimore (9-5), Cincinnati (8-6) y uno muy contundente de locales ante Washington (8-6).

Pero por más optimista que uno quiera ser con su equipo, estos Acereros no le han dejado a sus aficionados más que una dura lección de cautela, de misterio, de duda por saber qué equipo es el que se va a presentar a la hora del juego.

Basta con recordar que también hablamos del mismo equipo que ha perdido contra las potencias de Tennessee (5-9), Oakland (4-10), Cleveland (5-9) y San Diego (5-9) y estuvo a nada de sufrir una más a manos de Kansas City (2-10).

Esos son cuatro juegos que un equipo aspirante al título, como se aferran en verlo algunos, debe ganar. Podrás perder uno de ellos en un descuido, a todos les pasa: Pats con Arizona, Atlanta con Carolina, San Pancho con San Luis, Green Bay con Indy, son los mejores ejemplos.

Claro, puedes perder uno de esos juegos, no CUATRO.

Esa es la diferencia. Una muy marcada diferencia.

Me preguntan a mi y yo les digo la verdad, los Steelers no merecen ser un equipo de playoffs, no con toda esa inconsistencia. Pero vamos, en ese caso tampoco lo merecería un equipo tan limitado como Indianápolis.

Un equipo como Pittsbugh no merece estar en playoffs por su inconsistencia ofensiva, por su nulo ataque terrestre y por ser un equipo que constantemente pierde las batallas de intercambios de balón y que ni siquiera pudo interceptar a Tony Romo. Si a eso le sumamos lesiones, edad y la evidente carencia de química entre su quarterback franquicia y su coordinador ofensivo el resultado es un equipo de 7-7.

El punto aquí no es de merecimientos, es de logros y tanto Pittsburgh como los Colts son conjuntos que pueden conseguir un boleto a jugar en enero. Qué tan útil les sea calificar o durante cuánto tiempo vayan a jugar en playoffs es otro asunto.

Si la temporada regular terminara hoy:

En la AFC

BYE: Houston (12-2) y Denver (11-3)

Comodines: Cincinnati (8-6) en Nueva Inglaterra (11-3) e Indianápolis (9-5) en Baltimore (9-5)

En la NFC

BYE: Atlanta (12-2) y San Francisco (9-3-1)

Comodines: Minnesota (8-6) en Green Bay (10-4) y Seattle (9-5) en Washington (8-6)

Dos puntos a resaltar de este panorama.

Veamos, la primera y más importante de las cosas es que así como no está Pittsburgh, TAMPOCO está Dallas. Así como el campeón defensor, los Giants.

La segunda es la presencia de tres quarterbacks novatos (Luck, RG3 y Wilson).

Y ahora unos pensamiento DeTocho un poco 

• Basta con la defensa a Mark Sanchez. Si Rex Ryan tiene que decidir entre su chamba y la de Mark, todos sabemos que es lo que va a suceder tarde o temprano. Todas las señales apuntan a que será más temprano que tarde. Algo así como el próximo domingo.
• Y hablando de los que están próximos a perder su chamba, creo que los Packers ya se tardaron en darle una patada en el trasero a Mason Crosby. No deberían pedirle a Crosby que se patee a si mismo… posiblemente fallaría.
• Leí algo muy gracioso: Nick Saban, en la víspera del bicampeonato colegial, sigue justificando su elección de firmar a Culpepper en lugar de Brees para aquellos Delfines y ahora le achacó la culpa a los doctores del equipo. Supongo que en Nueva Orleáns eso les causó más gracia que a mi.
• Los números de Calvin Johnson no dan evidencia de ser víctima de la Maldición Madden (un poco menos efectiva y de efecto mucho más retardado que la Maldición DeTocho). Pero la actuación del equipo es el claro ejemplo de que el gordito sigue siendo infalible.
• La lista de coaches candidatos al desempleo es más larga que una escapada de Adrian Peterson. Hagamos el recuento: Norv Turner, Romeo Crennel, Jason Garrett, Andy Reid, Mike Munchak, Ken Whisenhunt, Dennis Allen y creo que es prudente agregar los nombres de Jim Schwartz y Rex Ryan.
• Luego de despedazarse la rodilla, enfrentar cargos injustos y que probaron ser infundados de resistirse a un arresto y de jugar para un equipo tan gris, ¿hay alguien que no esté apoyando a Adrian Peterson para que rompa la marca de 2105 yardas en una campaña del gran Eric Dickerson?
• Sin afán de molestar a nadie, pero no creo que haya un equipo, de los que hoy por hoy estarían jugando la postemporada, que llegue en peor forma física, anímica y psicológica que los Ravens. Blanditos por donde se les vea.
• Marca de 10-6 en los picks de la semana 15. Hubo un par que se me escaparon de las manos hacia el final… como el de Tampa Bay.