La jornada del lunes cierra con el Fiesta Bowl

Un equipo que bien podría estar jugando por el título, buscará echar a perder el que es probablemente el último partido de uno de los prospectos colegiales más importantes en la historia.

Para Andrew Luck será seguramente su último partido colegial, antes de convertirse en la primera selección del draft de la NFL. Stanford deberá detener a Oklahoma State y demostrar que la decisión de dejarlos fuera de la pelea por el título de la BCS fue buena.

Sin duda Luck será la gran atracción. Dos veces votado entre los finalistas para el trofeo Heisman,regresó para un año más como colegial a pesar de que podría haber sido la selección número uno en el draf del año pasado. Stanford se quedó a una victoria de pelear por el título.

La derrota el 12 de noviembre frente a los Oregon Ducks 53-30, quebró las aspiraciones del Cardinal de alcanzar el BCS Championship.

Dicha derrota dejó el camino abierto para Oklahoma State, pero días después, los Cowboys serían sorprendidos por Iowa State y con ello dejaron la oportunidad de jugar por el título.

La ofensiva liderada por Luck, promedió 43.6 puntos por partido, pero en sus último 3 encuentros no pasaron los 31.

Del lado de los Cowboys, su mariscal de campo, Brandon Weeden y el receptor Justin Blackmon, son una combinación de miedo. Weeden terminó con más de 4 mil yardas y 34 pases de anotación.

Este será el primer Fiesta Bowl para Stanford, pero su segundo tazón de la BCS consecutivo, derrotaron el año pasado a Virginia Tech 40-12 en el Rose Bowl.

Los Cowboys participan en su sexto bowl consecutivo, con sólo una aparición en el Fiesta Bowl, en el año 1974, en el cual vencieron a BYU.

Stanford +5 Oklahoma State -5 Over 76