Auténticos campeón en una final histórica

El fútbol americano estudiantil de la ONEFA dejó en claro que es la deporte estudiantil por excelencia, al tener una final de las llamadas históricas, en donde Auténticos Tigres levantó el título al vencer de forma cardiaca, 16 a 15 a unos aguerridos Pumas CU.

Más de 40 mil aficionados reunidos en el Estadio Universitario y otros miles a través de los diversos medios, vivieron al filo de la butaca una de las mejores finales en los últimos años que se definió hasta el minuto final a favor de los Tigres.

Aunque en el primer cuarto Auténticos parecía que se podían alzar con la victoria de forma clara al irse al frente 13 por 0, poco a poco los Pumas fueron acercándose en la pizarra hasta dominar la segunda parte , aunque al final se quedaron a cinco yardas de darle la voltereta al marcador al jugarse la conversión de dos puntos.

Tigres se ponía al frente en su serie inicial con un pase de Roberto Vega de 48 yardas para Héctor Corrales, quien tras quedarse con el envío se escapaba hasta la zona de anotación, poniendo la pizarra 6-0, ya que el extra se fallaba por un mal centro.

Pero Pumas descontaba de inmediato con un gol de campo de Mauricio Morales de 40 yardas, para el 6 por 3. Auténticos movía de nueva cuenta al ovoide hasta la zona de anotación en corrida de una yarda de Joaquín González, quien se lanzaba por los aires para ingresar a la zona prometida y así dejar el marcador 13 a 3.

En el segundo cuarto los Unamitas pudieron acercarse en la pizarra, pero Mauricio Morales fallaba un par de goles de campo, para irse al descanso con la diferencia de 10 puntos.

Pumas regresaba en el tercer cuarto con toda la determinación del mundo y en su primer serie colocaba tres puntos más a su favor con gol de campo de 50 yardas de Morales, para el 13 a 6. Unos minutos después llegaría de nueva cuenta Mauricio Morales con su tercer gol de campo de la noche, ahora de 27 yardas, dejando la pizarra 13 a 9.

Auténticos se veía obligado a reaccionar y eso lo lograba en los primeros minutos del último cuarto con un gol de campo de 44 yardas de José Maltos, poniendo el marcador 16 a 9. Sin embargo, Pumas en lugar de colapsarse se motivaba e intentaba por todos los medios responder de la mano de su quarterback Bruno Márquez.

Sería faltando menos de un minuto y en cuarta oportunidad cuando llegaba la jugada esperada por la ofensiva de Pumas, cuando Márquez salía a su derecha y localizaba a su receptor en las diagonales en pase de 35 yardas, para poner el marcador más cerrado que nunca 16 a 15.

Vendría el momento más emotivo del encuentro, cuando el coach Raúl Rivera decidía jugarse la conversión de dos puntos con su mariscal de campo Bruno Márquez, quien era detenido en la yarda cinco, para así terminar con la última esperanza de los Pumas de alzarse con el triunfo.

De esta manera terminaba la final de la Conferencia Centro con un partido cardiaco y para la historia de la ONEFA.