Burros Blancos, a cabalgar hasta la final sin tropiezos

Los Burros Blancos del IPN en esta penúltima jornada de la temporada regular de la Liga Mayor de ONEFA han demostrado que tienen los tamaños para llegar hasta la mismísima final de la Conferencia del Centro, ya que se están imponiendo a fantasmas del pasado, como el vencer a sus hermanos institucionales, Águilas Blancas y la semana pasada, tener el suficiente temple para sacar el triunfo en el ultimo segundo ante Linces de la Universidad del Valle de México, Campus Lomas Verdes. Este mediodía en el emparrillado de los Perros Negros de Naucalpan visitarán a los Frailes de la Universidad del Tepeyac, donde esperan confirmar el buen trote que llevan en el 2011.

Al respecto, Ricardo Quintana (5), quarterback de quinto año de elegibilidad, comenta lo que ha sido la actuación hasta el momento de su equipo, sin dejar de lado, que el deporte de las tacleadas lo lleva en su ADN, porque su difunto padre jugó con Centinelas, sus tíos,  también, los cuales portaron el jersey de las extintas Ranas Salvajes de la Universidad Autónoma Metropolitana de Xochimilco, e incluso, de las Panteras de la UAM Iztapalapa, pero ninguno de ellos logró estar en Liga Mayor como Ricardo. Quien se equipó por primera vez con los Potros Salvajes de la Universidad Autónoma del Estado de México, en Toluca, quería ser corredor como su padre, mas su coach de infantil a los 9 años, le encontró su verdadera posición; sin embargo, la enfermedad de su difunto padre los trajo al D.F.

El ambiente, coaches, son entre otros, son los factores que le hicieron optar por Burros Blancos para cursar su Liga Mayor, desestresarse, divertirse, disfrutar lo que hace es lo que buscaba y sólo lo encontró aquí.

Ricardo, a lo largo de todos estos años de juego ha llegado a desarrollar tal concentración, que se puede abstraer del marcador parcial mientras se encuentra en la banca, esperando ingresar  para mover a su ofensiva hasta el end zone del rival, la nostalgia comienza a invadirlo, por aquello de estar viviendo la recta final de su carrera deportiva como brillante jugador, esforzarse, superar errores, le han ayudado a proyectarse a este punto (cotitular); una de las claves, es que entre todos, disfrutan jugar, pues a fin de cuentas, es esto es un juego. Entiende lo que es el equipo, por ello la disponibilidad para abrir o cerrar un partido, según las necesidades o circunstancias del mismo.

La confianza del coach para aventar el balón pese a la lluvia, le ayuda a hacer magia como la semana pasada: “Cuando venimos a entrenar, sabemos que tiene que salir la jugada”, se considera buen lector de las defensivas contrarias gracias al scout hecho por sus entrenadores,: “Es como la escuela, cuando estudias, se te facilitan las cosas”, afirma.  Ganar el juego anterior fue gracias a no perder la confianza en ellos mismos, sin importar la adversidad que les ofrezca el entorno, pese a sus errores, decisiones arbitrales u otros.

El estudiante de quinto semestre de Turismo en el IPN, tiene en claro terminar la carrera, por ello en enero del 2012, es su primera meta, y ayudar a entrenar a los Politos.  Por mientras, seguirá buscando hacer todos los primeros y diez, con todos los puntos posibles, explotar cada estancia en la zona roja del rival, ajustar, poner bien el pase en donde debe ser, para que los Burros cierren la temporada regular con un par de victorias, no piensa en que esto está terminando, sino, comprometido a cumplir su parte juego a juego.

Por su parte, el coach Ernesto Alfaro afirma afirma que a seis años del resurgimiento de Burros Blancos, se diseñó el equipo para llegar a la entonces Conferencia de los Diez Grandes en tres años y lo lograron en dos; la consolidación de su conjunto se dio en el momento exacto con el aporte de jugadores, coaches y autoridades y eso lo llena de satisfacción.  Es tal la confianza que hay en la capacidad de su equipo, que por eso se atrevieron a lanzar el balón en un juego lluvioso, con 1:24 por jugar ante Linces; correr implicaba avanzar poco y consumir mucho tiempo.  “El momento más difícil en la temporada, es cuando las cosas salen bien”, cita el coach Alfaro a Paul Oso Bryan, queriendo decir que no menospreciarán a Frailes.

Por si fuera poco, el gran momento que viven los Burros Blancos lo atribuye a que los jugadores están encontrando en el equipo  una premisa básica para que funcionen las cosas: “Divertirse con orden y disciplina, para que estén contentos y disfruten cada uno de los juegos, no cometer errores, ejecutar y ejecutar correctamente, más allá de grades esquemas ofensivas y defensivos, porque deben entenderlo, dominarlo y divertirse al ejecutarlo los jugadores, esa es al causa de verse mejor partido a partido”, concluye el coach Alfaro.