¿A quién culpar por el mal inicio en Philadelphía?

Las Aguilas de Philadelphia fueron derrotadas por cuarta vez en la temporada este domingo en Buffalo, el resultado final fue un 31-24 en favor de lo Bills, que aprovecharon algunos , no todos, los errores de los Eagles.

Restando 1.23 de juego, los Bills llegaron a tener una cuarta oportunidad y corto, cerca de medio campo, la decisión de buscar el primero y diez o patear y dejar lejos a la ofensiva de Philly de su zona de anotación era crucial. Después de pedir un tiempo fuera, Buffalo prefirió elegir una tercera opción, buscar un error más de las Aguilas y lo lograron.

Juqua Parker, liniero defensivo, saltó gracias al conteo de Ryan Fitzpatrick, un largo conteo antes de la jugada, lo cual le dio el primero y diez a los Bills y por ende el partido.

No se debe culpar a este hecho la derrota de Philadelphia, no se cansaron de cometer errores durante todo el partido, 4 intercepciones, un fumble perdido, 5 castigos en total, tres de ellos en el crucial último cuarto y suficientes tackleadas falladas para que Fred Jackson, el corredor de los Bills lograra 11 yardas terrestres.

Para Andy Reid, no hay a quien culpar más que a el mismo. Reid ha sido un gran coach desde el año 1999, cuando llegó a Philadelphia. Con todo el talento que el equipo tiene, no parecen poder explotarlo, y es aquí donde Reid quizás tenga razón. El coach debe ser capaz de sacar lo mejor de cada jugador y saber cuando los errores son suficientes. Sin importar los grandes contratos o las etiquetas, las Aguilas pareciera que no entrenan los suficiente, que no estudian al rival como deben, el talento no es suficiente en esta liga.

A pesar de que Vick se echa la culpa y que sus errores han costado puntos, el confiar tanto en sus piernas y su poderoso brazo no es suficiente para ganar partidos y ser efectivo. Los pequeños detalles, como prestar atención en momentos importantes, saber que es mejor salirse del campo y no arriesgar el balón a intentar hacer una jugada grande basándose en las habilidades personales, son características propias del coacheo el cual se ve que es deficiente en el equipo.

La presión ha crecido tanto en este “Dream Team”, que al parecer ya se ha convertido en un gran problema, y el no manejarla correctamente se transforma en mayor cantidad de errores. Los jugadores buscan hacer una gran jugada cada vez que toman el balón, en lugar de pensar y regresar a lo básico del deporte.

Andy Reid fue proporcionado con todas las armas necesarias para alcanzar finalmente el título del Super Bowl, la gerencia no reparó en gastos para darle todo lo que el pidió para formar un equipo lleno de talento; veloz, fuerte, hábil, pero el coach ha fallado totalmente en darle a este equipo una meta aparte del título, algo por lo que jugarse todo en cada llamada en el emparrillado y ha fallado miserablemente en formar un equipo en lugar de tener jugadores con contratos millonarios, que al final tienen un récord de un partido ganado y cuatro dolorosas derrotas.